El que presentaba las lesiones más graves tuvo que ser sedado para que el 061 lo atendiese.

Sobre las siete y cuarto de la mañana de ayer, una llamada a la Comisaría de Pontevedra alertó de que en una céntrica plaza de Pontevedra una decena de personas había arrinconado a un joven contra una pared y le estaban dando una paliza. Una dotación se trasladó de inmediato a la confluencia de la calle Peregrina con la plaza de Compostela. Los agentes nacionales vieron a un chico que estaba ensangrentado y a dos grupos de jóvenes.

Optaron por llamar al 061 e identificar a las personas que allí estaban. Todo parece indicar que la decisión de los funcionarios propició que los presuntos implicados en la pelea reaccionasen con insultos y otras descalificaciones hacia los policías pontevedreses.

Asimismo, los servicios médicos comprobaron que el joven lesionado estaba muy nervioso y algo violento, por lo que no lo podían atender. Los agentes tuvieron que intervenir para reducirlo, mientras los facultativos lo sedaban.

J.?M.?M.?L., de 22 años, fue trasladado a un centro sanitario pontevedrés, en donde sería dado de alta horas después, según trascendió ayer.

Otros dos resultaron con lesiones en un ojo y en una rodilla, pero no tuvieron que recibir asistencia médica.

Hipótesis policial

Aunque las indagaciones policiales prosiguen para esclarecer todos los hechos, la comisaría adelantó ayer que la principal hipótesis con la que se trabaja es que los implicados en la pelea son todos militares profesionales de la base de la Brigada de Infantería Ligera, quienes probablemente habían estado toda la noche celebrando el inminente comienzo de la misión internacional en el Líbano.

Aunque se desconocen los motivos que pudieron derivar en este enfrentamientos entre militares de distintas unidades de la Brilat, no se descarta que el consumo de alcohol hubiere influido o, incluso, desencadenado el incidente.

Además del joven herido, la Policía Nacional de Pontevedra identificó a otros ocho militares que se cree que podían estar divididos en dos bandos de cuatro al comienzo de la pelea. La intención de la comisaría es tomarles declaración a lo largo de estos días para tratar de dilucidar el trasfondo de la reyerta, los motivos de la misma y las personas que pudieron haber agredido directamente a J.?M.?M.?L. «Sólo ellos saben cómo y por qué comenzó todo», incidieron fuentes próximas a la investigación abierta.

Sobre este punto, fuentes policiales señalaron que no sería extraño que en los próximos días se produjesen nuevas identificaciones de individuos que pudiesen estar vinculados de alguna manera con la pelea o que se tomase declaración a otras personas con respecto a lo ocurrido a primera hora de la mañana de ayer.